Esto no siempre se debe únicamente a los cambios de estación. Factores como el estrés crónico, la falta de descanso reparador, el déficit de micronutrientes esenciales, la salud intestinal comprometida, infecciones mal resueltas y el consumo excesivo de alimentos ultraprocesados, juegan un papel clave en la disminución de nuestras defensas.

La buena noticia es que el fortalecimiento del sistema inmune no es un acto aislado ni un remedio momentáneo, sino un proceso integral que comienza en el estilo de vida. En Clínica LIVO, abordamos este desafío desde un enfoque médico funcional, priorizando la prevención y el tratamiento personalizado.

Tres pilares fundamentales para optimizar tu sistema inmune

1. Alimentación con propósito

Más que seguir dietas restrictivas, el objetivo es nutrir al cuerpo de forma estratégica. Una alimentación rica en frutas y verduras de distintos colores, grasas saludables, proteínas de calidad y con bajo consumo de azúcares refinados, crea un terreno metabólico favorable para las defensas.
En nuestras consultas de nutrición funcional, evaluamos no solo qué comes, sino cómo y por qué lo haces, identificando hábitos que pueden marcar la diferencia en tu energía y bienestar.

2. Salud intestinal: la base de la inmunidad

El intestino alberga aproximadamente el 70% de las células inmunitarias de nuestro organismo. Una microbiota equilibrada y una mucosa intestinal saludable son esenciales para prevenir infecciones y regular la inflamación.
Síntomas como hinchazón, gases, estreñimiento o diarrea recurrente pueden indicar que el sistema digestivo está comprometido, afectando directamente la capacidad de defensa del cuerpo.
En la medicina funcional, tratamos el intestino como el «segundo cerebro», implementando estrategias personalizadas para restaurar su equilibrio.

3. Terapias de apoyo: sueroterapia inmune

En determinados casos, es necesario reforzar al organismo de manera más inmediata. La sueroterapia es un tratamiento intravenoso que administra vitamina C en alta dosis, zinc, complejo B y biorreguladores, optimizando la respuesta inmune de forma rápida y efectiva.
Este tipo de terapia se utiliza con éxito en épocas de alta incidencia viral, ayudando a cortar ciclos de recaídas y mejorando la capacidad del cuerpo para enfrentar infecciones.

Prevención con ciencia y cuidado personalizado

En Clínica LIVO, creemos que la salud se construye día a día, a través de hábitos sostenibles y el acompañamiento médico adecuado. Nuestro equipo está comprometido en escuchar, evaluar y proponer soluciones integrales que combinen evidencia científica y calidez humana.

Si este invierno sientes que tu energía ha disminuido o que tus defensas no responden como antes, agenda una consulta médica funcional o una sueroterapia inmune personalizada.
Porque a veces, el mejor autocuidado… es dejarte cuidar.